Te echo de menos.
Sobre todo de noche.
Sobre todo de día.
Cuando me despertabas
soplandome el pelo
O besandome la espalda.
Cuando mordias mis miedos
y relajabas mis nervios.
Ya no temblaba.
Cuando sonreias bajo las sabanas
o entre los rayos del sol.
Sonreias por los dos.
Y por el mundo entero.
Cuanto bien me has echo
enseñándome a amar
a quererme
a quererte.
A querernos.
Cuanto mal me has echo.
enseñándome que las cosas acaban
en cuanto el aire sopla
Enseñándome a odiarme
A extrañarte.
A echarnos de menos
Texto: Andrea Fragueiro (www.amorconcuchilloenmano.blogspot.com.es )
No hay comentarios:
Publicar un comentario